Hacer las cosas con pasión podemos conseguir todo lo que nos proponemos: NutriRosa

El año pasado Rosa María C. Leal vivió dos situaciones especialmente difíciles, luego de seis años brindando servicios financieros en una dependencia pública, le informaron que ya no podría continuar laborando, y casi cuarenta días después, sufrió la ausencia física de su madre.
Superando la adversidad personal y siendo una mujer de fe y fortaleza decidió emprender su propia empresa brindado tributo a Mamá Rosa y creó NutriRosa, un negocio dedicado a brindar alimentos saludables con ingredientes de calidad a personas que requieren llevar una dieta especial, ya sea por diabetes, daño renal, triglicéridos, colesterol o aquellas personas que desean mantener una dieta rica y nutritiva. El corazón de NutriRosa es sin duda la experiencia de los últimos meses de vida de Mamá Rosa, puesto que su hija se dedicó de tiempo completo en acompañarla a sus citas médicas y cuidar su alimentación, “era diabética entonces llevamos un régimen de alimentación que permitió tener calidad de vida y por más de cinco años se sobrepuso a la enfermedad”.

Hoy en día NutriRosa brinda empleo a seis personas, en poco tiempo consolidó una cartera de clientes frecuentes que les gusta la diversidad de opciones que brinda la comida saludable. “Seis años en un trabajo estable logré sacar adelante a mis dos hijos con sus estudios y pese a que las expectativas no eran del todo positivas, a la vuelta de un año, sé que haciendo las cosas con pasión podemos conseguir todo lo que nos proponemos”. Acepta que no ha sido fácil el iniciar una empresa, “afortunadamente tengo muchos amigos  muy solidarios que me brindan sus experiencias y consejos para formar el logotipo, el nombre y el proceso de elaboración que nos permita ser eficientes al momento de entregar el pedido.

WhatsApp y Facebook son el vínculo para lograr llegar a más personas”. Becados Al poco tiempo de que NutriRosa contó con la preferencia de sus clientes, Rosa María C. Leal tomó la iniciativa de tener becados, personas totalmente desamparadas, “cuando acompañaba a mamá Rosa a sus citas médicas, me di cuenta que muchas personas están solitas y que difícilmente podrían llevar una dieta saludable, es por ello que decidí brindar las comidas totalmente gratis”. La idea de Rosy contagió a algunos amigos para brindar su tiempo o donativo para seguir apoyando a los becados.


Redacción: Blanca Neri 
Fotografía: Aarón Andrade