Repostería casera de sabores especiales que distinguen su marca: Postres de Macadamia

TEXTO Y FOTOS Aarón Andrade Ramírez

Leonor de la Mora Béjar es Maestra en Ciencias y Administradora Pública, pero decidió dar un giro a su vida y dedicarse a la repostería para estar presente con sus hijas y administrar su tiempo entre la familia y la empresa. Inició hace tres años durante la dulce espera de su segunda hija, puso pausa en sus actividades profesionales y políticas, para dar paso a una nueva historia llena de amor y sabor: Postres de Macadamia.

El ingrediente base de sus postres es la nuez de macadamia, de origen australiano y que gracias a su comercialización se ha dispersado a diferentes partes del mundo con gran aceptación por su sabor especial y el gran contenido nutricional. Tiene forma de avellana, con una cáscara muy dura, es un fruto rico en vitaminas, minerales y omega 3, esenciales para mantener una buena salud. La familia de la Mora tuvo la idea de sembrar árboles de macadamia en un terreno de la comunidad del Naranjal, sin imaginar que lograría una importante producción, que ahora rinde frutos, literalmente.

TIEMPO DE CREAR

Los postres de Leo de la Mora tienen una excelente aceptación entre sus clientes. “Impulsada por las recetas de mamá que eventualmente preparaba pay casero para fechas especiales, así comencé la venta entre los amigos que se encargaron de recomendar de boca en boca y fue creciendo hasta convertirlo en una pequeña empresa”.

“Es un negocio sumamente generoso, que me da la posibilidad de estar al pendiente de mi familia. Todo se realiza desde la cocina de mi hogar, un espacio donde tengo una pequeña bodega para almacenar todo lo que necesito y me organizo en los tiempos para poder hornear y repartir los pedidos que me solicitan”. El pay con nuez de macadamia sigue siendo el producto estrella, sin embargo ha incrementado su línea de postres como: Brownies de macadamia con chocolate, galletas tradicionales tipo besos de nuez, pay de guayaba, guanábana y mamey. Sabores especiales que distinguen su marca. Es un producto que en Colima no tiene competencia, asegura, “nadie más lo produce, por lo que resulta fácil entrar al mercado, con un producto delicioso y nutritivo. Ahora el siguiente paso es formalizar el negocio, posicionar nuestra marca y buscar un espacio en donde los clientes siempre puedan encontrar nuestros productos.”